Wednesday, June 18, 2008

derecho a réplica, último de los derechos

No es castigo lo que remedia los corazones
sino simpatía

La equivocación
es odiar
/ se

Esta canción, letra y música, resume mejor que ninguna,
para mí, lo que significa la decepción ante el fracaso del amor.
En ella, las palabras del amante no pueden dejar de sonar como reproche desde el punto de vista del amado: que desea la libertad, que vive el amor del otro como atadura y le genera culpabilidad. Pues, ¿cómo no sentirse culpable cuando se recibe amor y se es incapaz de corresponder? Amar es pensar sobre el otro con la mejor de las intenciones y desearle el mayor bien. Desgraciadamente, no siempre se está a la altura de tal oficio (y digo oficio porque tiene algo de trabajo una vez que se presenta ante nosotros). Lo más difícil de entender es que no hay razones que expliquen la incapacidad de amar; no es la insuficiencia del amante la que limita la correspondencia: no es verdad que no se amara al otro porque tuviera defectos, porque no encajara con nuestro modo de ser o hubiera algo “que no funcionara”, a no ser que lo que no funcionara fuera el amor mismo desde un inicio; porque si acaso algo es insuficiente es la propia naturaleza humana, que no siempre está en condiciones de dar lo mejor de sí. Todo ser humano merece ser amado, todo ser es único, peculiar, valioso. El amante es ingenuo en la expresión del amor, probablemente injusto desde su rapto -que le posee, que le domina y le hace comportarse de manera desproporcionada- al asignar al otro la difícil tarea de corresponder a ese amor, y al mismo tiempo es ciego: ciego para entender que aquello que a él le viene dado tan fácilmente, como una evidencia, sin duda posible, no sea capaz de sentirlo y expresarlo el otro. La condición del amante ante el fracaso del amor es siempre de incredulidad: ¿cómo es posible? se preguntará, "no lo creo", dirá, "no lo creeré hasta que no pongas la mano en el corazón y me digas que se ha acabado verdaderamente. No lo creeré hasta que no me mires a los ojos y me digas que es esto por lo que estamos pasando". El principal fracaso en el amor proviene pues de la incapacidad de donarlo, pero no es algo de lo que se pueda tener culpa, como no se tiene culpa de que amanezca un día lluvioso y gris. El amor no lo inventamos, sino que se nos aparece. La única culpa posible, a mi entender, es matarlo si alguna vez nació. Y esto, a su vez, es igualmente humano, demasiado humano. Ningún juicio excesivamente duro pues, cabe levantar contra semejante acto. Pero la tristeza y la añoranza no es juicio, sino comprobación de lo limitada de nuestra naturaleza, y lo que exige el amante, en esta canción, no es restauración de un daño, sino enfrentamiento de la cuestión: autenticidad, simpatía por el otro, reconocimiento. A pesar de los pesares. Aunque cada uno siga su camino. Y si algún reproche cierto se puede leer entre líneas, no es otro que el de no haber sido capaces de cuidar y hacer perdurar algo tan frágil y valioso como el amor que dos personas pudieron llegar a profesarse un día, y más que un reproche, pudiera ser un llanto por lo perdido, por lo que nunca se repetirá.

“Hand on your heart” José González.

Well it’s one thing to fall in love
But another to make it last
I thought that we were just beginning
And now you say we’re in the past
Look me in the eye
and tell me we are really through
You know it’s one thing to say you love me
but another to mean it from the heart
And if you don’t intend to see it through
why did we ever start?
I wanna hear you tell me
you don’t want my love
Put your hand on your heart and tell me
it’s all over
I won’t believe it till you
put your hand on your heart and tell me
that we’re through
Put your hand on your heart
They like to talk about for ever
Most people never get the chance
Do you wanna lose our love together
Do you find a new romance
I wanna hear you tell me
you don’t want my love
Put your hand on your heart and tell me
it’s all over
I won’t believe it till you
put your hand on your heart and tell me
that we’re through
Put your hand on your heart
hand on your heart
Look me in the eye
and tell me we are really through